Muchos Dictadores han empleado el rapto y las desapariciones forzadas como actos de tortura criminal ejercido desde el poder.
Con ellas se multiplican los efectos del terror desde el Estado, infringiendo de esta forma, tanto a los secuestrados, torturados y asesinados, como a sus familiares.
Estos hechos se producen hoy en: Rusia, China, Turquía, Irán y en Países hermanos como Venezuela, contando con el apoyo de individuos como Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero, la Vicepresidenta Yolanda Díaz y los Presidentes Zapatero o Sánchez, votados por españoles sin escrúpulos.
Veamos a continuación como se materializan estos actos, descritos por D. Antonio Ledezma, patriota venezolano forzado a exiliarse en España.
El delito de las desapariciones forzosas: una comparación entre Venezuela y las dictaduras del Cono Sur
«En la Venezuela contemporánea, la subordinación del Poder Judicial al Ejecutivo perpetúa la impunidad y deja a los ciudadanos indefensos frente a la represión estatal».
Fuentes