España se ve sometida, con el actual Gobierno de Sánchez, separatistas y filo terroristas, al actual preludio de golpe de estado encubierto, que sólo la resistencia nacional, firme y pacífica, puede detener. Se trata de una fiera lucha de voluntades, unos por mantener nuestra Constitución que tanta sangre ha costado defender, y otros para sobrepasarla en su espurio beneficio.
España resistió una dominación con el espíritu del 2 de mayo de 1808:
La Historia de España ha padecido, de manos de las corrientes progresistas, la ignorancia consciente de episodios reconocibles en nuestra nación y otras en formación en Europa, gestas patrióticas en la historia contemporánea de cuya naturaleza emerge La Nación libre, valiente, insumisa. Cítese como el punto de partida del patriotismo nacional, el 2 de mayo de 1808, en que el pueblo, en perfiles claros e identificables (fuera de la definición años después del sentido romántico del concepto “pueblo”), se levantó contra el poder que privaba a La Nación de sus esencias históricas, bajo un poder colaboracionista que nos entregaba a una dominación extranjera: los franceses.
“Desde Ocaña debieron los andaluces prepararse para recibir pacíficamente al vencedor, vean las poblaciones llorar a esta gran ciudad y conozcan que no tiene otro remedio que la sumisión”.
El Gran Imperio francés fue derrotado y expulsado por las fuerzas populares, sectores del ejército, el clero y el pueblo (artesanos, trabajadores). La victoria se cimentó en la autorganización: Las guerrillas, el sentido patriótico y la dignidad de la nación. Nadie
creía en victorias tan brillantes con tan limitados medios.
Del pueblo surgieron las Constituciones y de ellas los gobiernos, que practicaron-como instrumento político-los indultos o amnistías, escasamente justificadas en demasiadas ocasiones.
Ahora no son los franceses, sino el gobierno de Sánchez con su corrupta Amnistía:
La ley de amnistía, los Indultos o proposiciones diversas sobre perdón de delitos, constituye un elemento repetido e insistente, que desvela la relación entre los cambios de gobierno (no necesariamente de tendencias durante el XIX y XX español) y las necesidades
políticas de los llegados-en formas diversas-al poder (de forma no exhaustiva hasta 1936, se produjeron indultos parciales, amnistías incompletas en los años:1832,1834,1837,1840.1846,1854,1856,1860,1871,1874,1890,1906,1914,1931,193 4,1936) por delitos varios y punto de partida para “iniciar “nuevas formas gubernamentales.
Nunca estuvo especialmente diferenciado la naturaleza jurídica de Indulto y Amnistía.
Hoy, las escuelas jurídicas, han precisado su especificidad. Ambas concesiones se distinguen en que el indulto se ejerce sobre delitos que han sido juzgados, condenados y conmutadas las penas mientras que la Amnistía borra cualquier conducta o actos delictivos ni siquiera juzgados y, por consiguiente, condenados.
La Amnistía propuesta por el Gobierno Sánchez es el inicio de un golpe de estado y casi una copia de las razones introductorias de la Promulgada por el Gobierno del Frente popular de 1936.Y-si bien no se atreve a ello-a aceptar los objetivos que pretenden anular la Amnistía de 1977 -que dio paso a nuestro actual y moderno régimen democrático- y cuyos enemigos mantienen que deben ser juzgados, retirando las concesiones, para juzgar al franquismo, secuelas, y personas cuya relación sólo pueda ser determinada por las asociaciones de memoria histórica o género y partidos de izquierda o sindicatos. No obstante, es un punto de partida “político “ interesado para derogar La Ley de 1977, base del gran proyecto de Reconciliación Nacional y la Transición:
” Queremos abrir la vía a la paz y a la libertad. Queremos cerrar una etapa y abrir otra. Nosotros, precisamente, los comunistas, hemos enterrado nuestros muertos y nuestros rencores. Nosotros estamos resueltos a marchar hacia adelante en esa vía de la libertad, en esa vía de la paz y del progreso. Marcelino Camacho. Intervención sobre la Amnistia14-oct.-de 1977.
La Resistencia nacional, firme y pacífica, es el freno a esta dictadura:
Para los constitucionalistas, politólogos o historiadores, el análisis de la propuesta de una eventual Ley de Amnistía–aún no conocida totalmente-es esfuerzo estéril. No aparece-la Amnistía-en la Constitución y los posibles fundamentos remiten a 1936:
resultado electoral no respetado, sublevaciones sensaciones populares, interpretación del derecho (bajo pretensiones irrelevantes) y finalmente, un violento insulto, sin el menor pudor y provocaciones a las leyes. Sin Paz, Piedad, Perdón. Por la fuerza.
El gobierno Sánchez-ETA-Separatismo-Tribunal Constitucional no deja de ser una más de las intentonas decimonónicas que duraban unos años, siempre convulsos. Pero la emergencia democrática y la decisión de perpetrar un Golpe de Estado implacable convierte-como los años del Odio de 1930-la violencia organizada en un acto de naturaleza histórica cuyo recorrido es peligrosamente imprevisto.
Y ¿qué se esconde tras la Amnistía?
Sánchez declara que con ella pretende lograr la convivencia y armonía social. En realidad, lo que buscan separatistas y filo terroristas es la impunidad de su proceso de dominación, malversación y corrupción. Para Sánchez en cambio, se trata simple y llanamente de eliminar la separación de poderes y el cumplimiento de las leyes, de forma que se garantice su continuidad como Presidente y la consolidación de un “Cambio de Régimen”, de democrático a dictatorial. En este nuevo régimen a la medida de Sánchez, los derechos y deberes de nuestra actual Constitución, pasarían a ser discrecionales, según la fuerza de los chantajes de cada momento, y por supuesto, donde solo podría gobernar eternamente la llamada izquierda
en España. Es el modelo soviético y bolivariano.
¡No a la Amnistía, No en mi Nombre!
¡Todos a la calle con el espíritu de resistencia del 2 de mayo contra este nuevo dictador!
Fuente
EL 2 DE MAYO DE 1808 EN MADRID, O LA LUCHA CON LOS MAMELUCOS ( GOYA )