atentado de Algeciras

Debate sobre el atentado de Algeciras

El pasado 25 de enero, tiene lugar el atentado de Algeciras en España, se produjo el asesinato de un sacristán por parte de un ciudadano marroquí que se encontraba en situación irregular en nuestro país y tenía una orden de expulsión.

A continuación, analizaremos los hechos para determinar si realmente se trata de un atentado terrorista o si hay otra explicación. Para ello hemos contado con la opinión de expertos en lucha antiterrorista, asuntos legales y comunicación política.

Análisis de los hechos

En primer lugar, es importante señalar que el patrón de este ataque es distinto al de otros atentados terroristas cometidos por lo que se conoce como «lobo solitario«. Es decir, una persona que se radicaliza bajo la influencia de determinadas fuentes y decide, en un momento dado, cometer un atentado. En estos casos, el terrorista suele proveerse de un arma blanca o de otro tipo, acude a un lugar concurrido y empieza a agredir a las personas que circulan por la vía pública de forma inmediata para causarles la muerte.

Sin embargo, el caso de Algeciras es muy distinto. El ciudadano marroquí Yassin Kanza de 25 años, primero va a una iglesia y empieza a gritar a los feligreses que se conviertan al Islam. Este comportamiento evidentemente es una alteración del orden público y si hubiera habido algún policía municipal o nacional cerca, ya se habría intervenido.

Tras ver que nadie le hace caso, y sin perpetrar ninguna agresión, vuelve a su casa, coge un arma blanca de grandes dimensiones y se va a otra iglesia donde entra y empieza a derribar candelabros y armar escándalo. Se sube de pie al altar y empieza a gritar. De nuevo estamos ante una conducta que hubiera llevado a la detención inmediata de este sujeto en el caso de haber estado cerca casualmente algún miembro de las Fuerzas del Orden.

El sacristán, al ver lo que está pasando, le pide que se vaya de la iglesia. Yassin Kanza no le hace caso y comienza a increpar y amenazar a las señoras que estaban en la iglesia. El sacristán, al ver la situación, le vuelve a pedir que abandone el templo y es en ese momento cuando el ciudadano se revuelve contra él con intención de agredirlo.

El sacristán sale a la plaza para evitar la amenaza, pero desgraciadamente el agresor le da alcance y consuma el asesinato. Las imágenes que se han emitido por internet muestran que, tras el hecho, el asesino no intenta matar a nadie más, sino que se va andando con el arma en mano dando voces. Unos diez minutos más tarde es detenido por la policía en las inmediaciones del lugar de los hechos. En el lapso de tiempo transcurrido no agredió a nadie más. Cuando es llevado a la comisaría, se observa que tiene una actitud tranquila e incluso está sonriendo, lo que no se corresponde con la expresión de desafío u odio a que estamos acostumbrados con terroristas detenidos.

Temor general como consecuencia del atentado de Algeciras

El temor general es grande si unimos este asesinato del 25 de enero a las puertas de una iglesia en Algeciras (Noticia en Iniciativa 2028), con los hechos del 27 de enero en Santomera, Murcia (frente a un colegio, un exaltado increpó a un grupo de niños con sus progenitores, y al ser detenido por un padre policía municipal, se vio que llevaba en sus bolsillos un cuchillo de 10 cms., un Corán y medicación); o los hechos ocurridos el 28 de enero en una basílica de Oviedo (un individuo increpó a los presentes en árabe durante unos minutos y luego se marchó). 

Estos sucesos han generado sin duda una gran preocupación en la sociedad. Sin embargo, es importante analizar los hechos con detenimiento antes de llegar a conclusiones precipitadas.

Según se ha informado, y volviendo al caso de Yassin Kanza, su familia ha señalado que, cuando vivía en Marruecos, ya padecía problemas psiquiátricos. Un compañero de la infravivienda donde habitaba relataba en Canal Sur que era una persona rara, callada y qué en las últimas semanas, cambió su comportamiento y empezó a hablar del diablo y de Dios sin venir a cuento. Estas circunstancias hacen pensar que podríamos estar ante una persona con problemas mentales graves que, al no estar bajo tratamiento, acabó cometiendo un acto violento. Este tipo de situaciones, en las que individuos jóvenes trastornados cometen actos violentos, han ocurrido en numerosas ocasiones en otros países, pero nunca se tratan como atentados terroristas.

Las situaciones irregulares con orden de expulsión

Por otro lado, se ha mencionado que Yassin Kanza se encontraba en una situación irregular y tenía una orden de expulsión. Se debe conocer que una orden administrativa de expulsión no es inmediata, requiere unos trámites. En 2022 por ejemplo, el Ministerio del Interior incoó 34.949 expedientes de expulsión y sólo ejecutó 2.629. La policía fronteriza de Marruecos, país con el cual España tiene un acuerdo para expulsar a sus ciudadanos irregulares, es frecuente que rechace a la persona que es conducida por la Policía Nacional a la frontera para cumplir la orden de expulsión. Es posible, según algunas fuentes, que Yassin Kanza fuera uno de estos casos, es decir, que la policía española lo llevó a la frontera, pero sus homónimos marroquíes se negaron a aceptarlo.

Si fuera así, estaríamos ante una situación que no haría quedar bien al Gobierno de España, por su incapacidad para hacer cumplir la ley y los tratados. Por otra parte, el presentar estos hechos como un atentado terrorista perpetrado por un ciudadano marroquí en situación irregular, garantiza una reacción visceral de los partidos de la llamada “ultraderecha” que forzará a otra reacción del Partido Popular que, sea la que sea, quedará mal en todo caso.

Parece por tanto que los tratamientos policiales y de prevención serían distintos, pero optar por el relato terrorista en lugar del de musulmán aislado y exaltado, ofrece un doble rédito al Gobierno de Pedro Sánchez, tapa su incapacidad para hacer cumplir la ley y genera distracciones y reacciones extremas. Si esto fuera así, estaríamos ante una gravísima irresponsabilidad por parte del Ejecutivo. Generar miedo en la población y crear relatos terroristas sin estar seguros de ello, para presuntamente tapar incompetencias propias o generar reacciones xenófobas es muy peligroso.

Fuentes:

Europasur

Iniciativa 2028-noticias


Autor: Redacción | Artículos
Equipo de redacción de Iniciativa 2028

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies