Mientras miles de ciudadanos aguardan meses por una cita médica, por una ayuda que no llega, por una vivienda digna o por una respuesta del Estado, otros disfrutan del máximo confort en el corazón del Poder, en la Moncloa como refugio del privilegio fiscal . No por mérito. No por necesidad. Sino por apellido.
El caso David Sánchez en «la Moncloa»
Según revela Libertad Digital, el hermano del Presidente Pedro Sánchez, David Sánchez, habría vivido durante meses en La Moncloa junto a su esposa, mientras fingía residir en Portugal para beneficiarse de un régimen fiscal más favorable.
Todo ello, mientras cobraba un sueldo público desde la Diputación de Badajoz, y mantenía una habitación de hotel en Elvas como coartada tributaria. ¿El resultado? Un ciudadano privilegiado, alojado en la residencia presidencial, costeado por el erario público español, mientras tributaba fuera de España.
Y lo más grave: no se trata de un caso aislado. El entorno del Presidente, según el autor del libro La Sagrada Familia, estaría salpicado por tramas de corrupción, tráfico de influencias y privilegios institucionales.
Mientras tanto, el ciudadano medio ve cómo se recortan servicios, se endurecen impuestos y se diluye la confianza en las instituciones.
Esta entrada no es solo una denuncia. Es una llamada a la conciencia. A la movilización. A la exigencia de transparencia, justicia y rendición de cuentas. Porque mientras tú esperas, ellos se hospedan. Y eso, en democracia, no puede tolerarse.
Sánchez escondía a su hermano en La Moncloa mientras este fingía vivir en Portugal para pagar menos impuestos
«David Sánchez, hermano del presidente del Gobierno, habría estado viviendo durante varios meses en La Moncloa junto a su esposa, Kaori Matsumoto, mientras que aseguraba estar viviendo en Portugal para beneficiarse de un régimen económico favorable»…
